La Policía Nacional desarticula en Pamplona un comando de ATA, la nueva ETA, que preparaba explosivos. Por Javier Navascués
La Policía Nacional detuvo a 10 personas que formaban un “talde” o grupo, del entorno de “Gazte Koordinadora Sozialista” (GKS), una organización juvenil vinculada a ATA. Los detenidos formaban un grupo que había sido responsable de graves acciones de violencia callejera o “kale borroka” en Pamplona en los últimos meses. Según la Policía Nacional los detenidos formaban un “grupo criminal” responsable de al menos 7 ataques a entidades bancarias y comercios, así como numerosos sabotajes, quema de contenedores y enfrentamientos con la Policía “todo ello de forma organizada y con una perfecta planificación de guerrilla urbana”, según la Policía. Cuatro de los detenidos dirigían al resto de miembros de la célula.
Los incidentes más graves tuvieron lugar en la tarde del 7 de noviembre de 2020 en el barrio pamplonés de La Rochapea, donde un numeroso grupo de manifestantes dirigido por los detenidos, provocaron graves disturbios y trataron de incendiar una sucursal de la Caixa, tras cruzar y quemar contenedores. Una familia de cuatro miembros que habitaba en el cajero tuvo que huir, sufriendo un serio trauma uno de los niños. Además, los violentos formaron barricadas y atacaron a la Policía Nacional.
Lo más preocupante es que a los detenidos les han sido incautados manuales para fabricar explosivos, junto con un esquema gráfico para la fabricación de cócteles Molotov de tipo químico, cinco cohetes modelo trueno, un puño americano, dos defensas extensibles metálicas, información para evitar el control policial, propaganda de GKS y numeroso material informático.
Los detenidos formaban parte del grupo radical “Indar Gorri” de la afición de Osasuna, y es que se considera que los grupos próximos a ATA forman el sector dominante de los grupos radicales de aficionados de Athletic Club de Bilbao, Real Sociedad y Osasuna. Además, los disidentes de ATA ganan terreno en las asambleas que por toda la geografía vasca celebran regularmente los jóvenes vinculados a la “izquierda abertzale” (ya que el mundo proetarra ha sido siempre asambleario, por definición). En esas asambleas de los pueblos Bildu y Sortu, a pesar de conservar su fuerza electoral, van desdibujándose en cuanto a las estructuras de militancia juvenil, mientras se fortalecen los sectores próximos a ATA, aunque ésta aún no tenga una representación política legal propia, tal como advierten desde hace tiempo las Fuerzas de Seguridad del Estado.
En definitiva, el futuro parece más que preocupante, en cuanto a la posibilidad de que un día cada vez más cercano se reactive el terrorismo etarra, tal vez con otras siglas y haría bien el Gobierno en extremar las precauciones y la vigilancia policial, viendo que su cercanía con Bildu y Otegui de poco está sirviendo para garantizar la seguridad y la libertad en Vascongadas y Navarra.
La Policía Nacional detuvo a 10 personas que formaban un “talde” o grupo, del entorno de “Gazte Koordinadora Sozialista” (GKS), una organización juvenil vinculada a ATA. Los detenidos formaban un grupo que había sido responsable de graves acciones de violencia callejera o “kale borroka” en Pamplona en los últimos meses. Según la Policía Nacional los detenidos formaban un “grupo criminal” responsable de al menos 7 ataques a entidades bancarias y comercios, así como numerosos sabotajes, quema de contenedores y enfrentamientos con la Policía “todo ello de forma organizada y con una perfecta planificación de guerrilla urbana”, según la Policía. Cuatro de los detenidos dirigían al resto de miembros de la célula.
Los incidentes más graves tuvieron lugar en la tarde del 7 de noviembre de 2020 en el barrio pamplonés de La Rochapea, donde un numeroso grupo de manifestantes dirigido por los detenidos, provocaron graves disturbios y trataron de incendiar una sucursal de la Caixa, tras cruzar y quemar contenedores. Una familia de cuatro miembros que habitaba en el cajero tuvo que huir, sufriendo un serio trauma uno de los niños. Además, los violentos formaron barricadas y atacaron a la Policía Nacional.
Lo más preocupante es que a los detenidos les han sido incautados manuales para fabricar explosivos, junto con un esquema gráfico para la fabricación de cócteles Molotov de tipo químico, cinco cohetes modelo trueno, un puño americano, dos defensas extensibles metálicas, información para evitar el control policial, propaganda de GKS y numeroso material informático.
Los detenidos formaban parte del grupo radical “Indar Gorri” de la afición de Osasuna, y es que se considera que los grupos próximos a ATA forman el sector dominante de los grupos radicales de aficionados de Athletic Club de Bilbao, Real Sociedad y Osasuna. Además, los disidentes de ATA ganan terreno en las asambleas que por toda la geografía vasca celebran regularmente los jóvenes vinculados a la “izquierda abertzale” (ya que el mundo proetarra ha sido siempre asambleario, por definición). En esas asambleas de los pueblos Bildu y Sortu, a pesar de conservar su fuerza electoral, van desdibujándose en cuanto a las estructuras de militancia juvenil, mientras se fortalecen los sectores próximos a ATA, aunque ésta aún no tenga una representación política legal propia, tal como advierten desde hace tiempo las Fuerzas de Seguridad del Estado.
En definitiva, el futuro parece más que preocupante, en cuanto a la posibilidad de que un día cada vez más cercano se reactive el terrorismo etarra, tal vez con otras siglas y haría bien el Gobierno en extremar las precauciones y la vigilancia policial, viendo que su cercanía con Bildu y Otegui de poco está sirviendo para garantizar la seguridad y la libertad en Vascongadas y Navarra.