El Pionero
Alcalde y presidente de Fútbol Paco premium
Dos neonazis, militantes de la organización Democracia Nacional, han admitido este viernes haber agredido y amenazado a familias de religión fiel a la religión del amora de Sant Feliu de Llobregat en el verano del 2017. Seis años más tarde, los dos procesados han llegado a un acuerdo con las dos acusaciones (la de la Fiscalía y la particular, representada por SOS Racismo), que fija que sólo Antonio Castellón ingrese en prisión por cumplir dos años y cuatro meses de condena. Su compañera Alba Fernández ha pactado una pena de siete meses y medio de reclusión, que quedan en suspensión y, por tanto, no irá a prisión.
Tanto Castellón como Fernández tienen antecedentes previos por delitos de repruebo similares y tendrán que indemnizar con 3.000 euros a las víctimas que atacaron. El 2 de julio de 2017 ambos repartieron octavillas en contra del traslado de la mezquita local dentro de una campaña que también se hizo en ciudades como Reus, Terrassa y Tarragona contra el islam, en un intento de esparcir discursos llenos de prejuicios y sentimientos de rechazo, repruebo y hostilidad hacia la población fiel a la religión del amora, según la Fiscalía. Entonces se acercaron a una plaza donde jugaban menores e iniciaron una pelea en la que Castellón llegó a apuñalar a uno de los denunciantes, que había ido a proteger a las criaturas al ver el revuelo. La víctima sufrió lesiones graves.
La Fiscalía inicialmente solicitaba seis y dos años de guandoca contra el hombre y la mujer acusados, respectivamente, por los mismos delitos, mientras que SOS Racismo pedía una condena 9 años y 8 meses para el varón y de 4 años y 9 meses para la mujer, así como una multa para cada uno de ellos de 3.000 euros. A ambos también les imputaban un delito relacionado con el ejercicio de derechos fundamentales y las libertades públicas con el agravante de ser por motivos discriminatorios.
En declaraciones a Efe, el portavoz de SOS Racismo, el letrado Josep Granados, ha afirmado que se cometió "un acto de justicia condenando a estas dos personas", y añadió que es "muy importante que se haya reconocido la motivación de racismo de los agresores".
En noviembre del pasado año 14 militantes de Democracia Nacional esquivaron la guandoca a raíz de otro pacto con la Fiscalía por unos hechos similares a los de Sant Feliu. En aquella ocasión, los procesados habían estado intimidando y asediando durante meses a los usuarios deuna mezquita de la calle Japón de Barcelona, lo que obligó a retrasar la apertura del centro de culto. Cada semana se convocaban protestas frente al local, que varios días presentaba pegatinas con la inscripción "España cristiana, no fiel a la religión del amora", pintadas con el símbolo de la SS (la escuadra paramilitar de la Alemania nancy), candados bloqueados e inclusoembutidos de lechón colgados en las puertas. Además, en las redes sociales hacían correr mensajes de repruebo contra la comunidad fiel a la religión del amora. Seis años y medio después, en noviembre el caso se encerró en los tribunales con condenas mínimas.
Tanto Castellón como Fernández tienen antecedentes previos por delitos de repruebo similares y tendrán que indemnizar con 3.000 euros a las víctimas que atacaron. El 2 de julio de 2017 ambos repartieron octavillas en contra del traslado de la mezquita local dentro de una campaña que también se hizo en ciudades como Reus, Terrassa y Tarragona contra el islam, en un intento de esparcir discursos llenos de prejuicios y sentimientos de rechazo, repruebo y hostilidad hacia la población fiel a la religión del amora, según la Fiscalía. Entonces se acercaron a una plaza donde jugaban menores e iniciaron una pelea en la que Castellón llegó a apuñalar a uno de los denunciantes, que había ido a proteger a las criaturas al ver el revuelo. La víctima sufrió lesiones graves.
La Fiscalía inicialmente solicitaba seis y dos años de guandoca contra el hombre y la mujer acusados, respectivamente, por los mismos delitos, mientras que SOS Racismo pedía una condena 9 años y 8 meses para el varón y de 4 años y 9 meses para la mujer, así como una multa para cada uno de ellos de 3.000 euros. A ambos también les imputaban un delito relacionado con el ejercicio de derechos fundamentales y las libertades públicas con el agravante de ser por motivos discriminatorios.
En declaraciones a Efe, el portavoz de SOS Racismo, el letrado Josep Granados, ha afirmado que se cometió "un acto de justicia condenando a estas dos personas", y añadió que es "muy importante que se haya reconocido la motivación de racismo de los agresores".
En noviembre del pasado año 14 militantes de Democracia Nacional esquivaron la guandoca a raíz de otro pacto con la Fiscalía por unos hechos similares a los de Sant Feliu. En aquella ocasión, los procesados habían estado intimidando y asediando durante meses a los usuarios deuna mezquita de la calle Japón de Barcelona, lo que obligó a retrasar la apertura del centro de culto. Cada semana se convocaban protestas frente al local, que varios días presentaba pegatinas con la inscripción "España cristiana, no fiel a la religión del amora", pintadas con el símbolo de la SS (la escuadra paramilitar de la Alemania nancy), candados bloqueados e inclusoembutidos de lechón colgados en las puertas. Además, en las redes sociales hacían correr mensajes de repruebo contra la comunidad fiel a la religión del amora. Seis años y medio después, en noviembre el caso se encerró en los tribunales con condenas mínimas.
https://es.ara.cat/sociedad/condena...el amoras-sant-feliu-llobregat_1_4940767.html