Epic Failer
Madmaxista
- Desde
- 2 Sep 2013
- Mensajes
- 3.344
- Reputación
- 9.655
Sucesos: El estafador que conoció a su víctima cacereña por Badoo es condenado a pagarle 65.842 euros | Hoy
La Audiencia Provincial de Cáceres también impone una pena de dos años de prisión a este hombre que se hizo pasar por legionario
www.hoy.es
La Audiencia Provincial de Cáceres ha condenado a dos años de prisión a un estafador que conoció a su víctima por Badoo. También es sentenciado a devolverle los 58.842 euros que le defraudó, y a que le indemnice con 7.000 euros por los daños jovenlandesales sufridos. A esos 65.842 euros tiene que sumarse el pago de 2.160 euros de multa.
Según figura en la sentencia como hechos probados, fue el 7 de enero de 2019 cuando la cacereña conoció al estafador por la página web de citas Badoo. Comenzaron a mantener contactos telefónicos y decidieron pasar juntos un fin de semana en la localidad de Porzuna, en Ciudad Real. Eso ocurrió el fin de semana del 12 y 13 de enero de 2019.
Siguieron manteniendo conversaciones por teléfono, y el procesado se fue ganando la confianza de ella para empezar a pedirle ayuda económica.
Le dijo que era legionario, que necesitaba dinero para solucionar unos problemas con grupos armados que lo tenían amenazado y que pudieran ser terroristas. También le pedía dinero diciendo que lo necesitaba para viajar al extranjero por asuntos profesionales, o para ayudar a varios niños desamparados que había encontrado en la calle en Suiza.
En total, desde febrero de 2019 al mismo mes de 2020 le hizo 150 tras*ferencias a él o a cuentas de otras personas relacionadas con el procesado. Le mandó 58.543 euros y se gastó más de 300 euros en comisiones de bancos.
Para engañarla, él mismo le llamó por teléfono simulando la voz, diciendo que a su conocido le hacía falta dinero, y también simuló ser terceras personas que supuestamente eran militares.
Durante el juicio ella aseguró que le había dejado arruinada y destrozada. «Desde que le conocí mi vida ha sido un infierno. Me decía que tenía que pagarle porque estaba en peligro mi vida y la de mis hijos», afirmó.
Contó que cuando le conoció estaba en paro, y para conseguir el dinero vendió su coche, su máquina de coser, empeñó las joyas de la familia y le pidió dinero a familiares y amigos. Afirmó que llegó a tener que ir a comedores sociales a pedir comida gratis. «Me dijo que estaba vigilada y perseguida. Yo pensaba que podía ir a casa en mi pueblo y encontrarme a terroristas internacionales, pero él me decía que no podía contar nada», declaró la víctima ante el tribunal.