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Madmaxista
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Pero la noticia no habla de ningun banco nacional... eeeeh ?
No me creo que el Santander no esté lavando cosas.
***
FinCEN Files: cómo los gigantes bancarios ayudan a blanquear billones de dinero neցro
Una investigación internacional del ICIJ y El Confidencial revela cómo los grandes bancos mundiales fallan una y otra vez en los controles para detener los flujos de dinero ilícito
https://www.ecestaticos.com/imagestatic/clipping/470/e72/470e72b28a74acc1b03c4b005b50bf77/fincen-files-como-los-gigantes-bancarios-ayudan-a-blanquear-billones-de-dinero-neցro.jpg?mtime=1600435999The FinCEN Files: las tuberías del sistema financiero. (Imagen: Pablo López Learte / Irene de Pablo)
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JESÚS ESCUDERO
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20/09/2020 19:00 - ACTUALIZADO: 20/09/2020 19:56
Standard Chartered Bank tuvo oportunidades de sobra durante más de una década de romper sus lazos comerciales con el Arab Bank jordano. Una de las primeras fue a raíz de que un terrorista se inmolara en 2003 en un autobús en Jerusalén, matando a siete personas y dejando heridas a otras 20. Uno de los supervivientes, Steven Averbach, decidió llevar el Arab Bank a los tribunales de Estados Unidos, acusándolo de haber movido dinero que había servido para financiar el atentado del autobús y otros ataques terroristas. A medida que el proceso judicial avanzaba, los reguladores estadounidenses encontraron en 2005 fallos en los controles del banco jordano contra el blanqueo de dinero, ordenándole que redujera sus tras*ferencias hacia Estados Unidos.
Pese a ello, Standard Chartered miró para otro lado y siguió ayudando a los clientes del Arab Bank a acceder al sistema financiero de Estados Unidos, incluso después de que las autoridades norteamericanas avisaran al banco británico —que luce como patrocinador principal de la camiseta del Liverpool— de que detuviera las tras*acciones a favor de clientes sospechosos. Las advertencias se tras*formaron en diciembre de 2012 en una multa de 227 millones de dólares por haber "conspirado con el Gobierno de Irán" para mover 250.000 millones de dólares en tras*acciones secretas, obteniendo "cientos de millones en comisiones" y dejando "el sistema financiero estadounidense vulnerable a terroristas, traficantes de armas, narcotraficantes y regímenes corruptos".
A pesar de sus promesas oficiales de mantenerse alejado de los clientes sospechosos, Standard Chartered procesó 2.055 tras*acciones por un importe total de más de 24 millones de dólares a favor de clientes del Arab entre septiembre de 2013 y septiembre de 2014. Ese mismo mes, se conoció el fallo del proceso judicial iniciado por Averbach, el superviviente del atentado en Jerusalén muerto en 2010 como consecuencia de las heridas sufridas. Un jurado de Brooklyn encontró al Arab Bank responsable de haber apoyado a sabiendas el terrorismo al tras*ferir dinero camuflado como donaciones en beneficio de Hamás, el grupo terrorista palestino. Pero incluso tras la sentencia —posteriormente anulada por fallos en el procedimiento judicial—, Standard Chartered siguió moviendo dinero con origen o destino en el Arab Bank: casi 12 millones de dólares hasta febrero de 2016.
El truco de la banca corresponsal: ayuda a los pequeños a cambio de un mayor negocio
JESÚS ESCUDERO
Los gigantes bancarios ofrecen intermediación a los bancos más pequeños para introducirlos en mercados financieros más sólidos a cambio de engrosar sus beneficios con comisiones
La relación comercial entre los bancos británico y jordano se puede reproducir a través de los informes de actividades sospechosas (SAR, por sus siglas en inglés) enviados por los responsables de cumplimiento de Standard Chartered a la Red de Control de Delitos Financieros (FinCEN, en inglés) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos. Más de 2.100 de estos documentos, hasta ahora secretos, constituyen la filtración FinCEN Files, una investigación coordinada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) después de que BuzzFeed News obtuviera estos archivos y los compartiera con un equipo formado por más de 400 periodistas de 110 medios en 88 países. Durante los próximos días, El Confidencial y La Sexta publicarán en exclusiva en España el contenido más relevante de estos archivos.
Los archivos filtrados ofrecen una visión única del secreto mundo del sistema bancario internacional. Clientes anónimos, delitos financieros y los fallos de los grandes bancos internacionales a la hora de controlar cualquier tras*ferencia sospechosa e informar al FinCEN, la unidad de inteligencia financiera de Estados Unidos, equivalente al Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias (Sepblac) español. Los documentos recogen tras*ferencias marcadas como sospechosas por los departamentos de cumplimiento de los bancos por un importe superior al menos a dos billones de dólares entre 1999 y 2017, equivalente al PIB de un año de Italia. Los informes SAR reflejan las preocupaciones de los vigilantes dentro de los bancos, pero no son necesariamente evidencia de delitos financieros o malas prácticas.
Aunque representan una gran cantidad, los dos billones de dólares identificados como tras*acciones sospechosas son solo una gota en un océano aún más grande de dinero sucio moviéndose a través de los bancos de todo el mundo. Los FinCEN Files representan menos del 0,02% de los más de 12 millones de informes SAR que las instituciones financieras remitieron a la agencia estadounidense entre 2011 y 2017.
Las ocho claves de los FinCEN Files, la nueva investigación del ICIJ y El Confidencial
JESÚS ESCUDERO
Todos los detalles de la nueva investigación sobre el sistema financiero global coordinada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) y con la participación de El Confidencial
Los documentos muestran que cinco gigantes bancarios mundiales —JP Morgan, HSBC, Standard Chartered, Deutsche Bank y Bank of New York Mellon— continuaron beneficiándose de los negocios de poderosos y peligrosos personajes incluso después de que las autoridades de Estados Unidos les advirtieran de estas relaciones comerciales e incluso los multaran por fallos en el pasado a la hora de contener los flujos de dinero neցro.
En el caso de Standard Chartered y su relación con el Arab Bank, un SAR del banco británico enviado un año después del fallo judicial por el atentado de Jerusalén admitía la "potencial financiación del terrorismo" del banco jordano. Standard Chartered detalló aún más estas actividades en un posterior SAR de seguimiento del caso, al advertir de que "actividades ilícitas" estaban siendo financiadas "bajo la apariencia de beneficencia" y donaciones.
El banco británico no contestó a las preguntas del ICIJ sobre el Arab Bank, y manifestó de forma genérica: "La realidad del sistema financiero global es que siempre habrá intentos para blanquear dinero y evitar sanciones. La responsabilidad de los bancos consiste en construir sistemas efectivos de detección y seguimiento. Nosotros trabajamos codo con codo con los reguladores y las autoridades para llevar a los autores ante la Justicia". En un comunicado, Arab Bank manifestó que "aborrece el terrorismo y no apoya ni fomenta las actividades terroristas". El banco jordano añadió que las acusaciones datan de hace casi 20 años, cuando las leyes antiblanqueo, las herramientas y las tecnologías eran diferentes de las actuales.
Jueces y parte
Los bancos tienen encomendada la misión de ser la primera punta de lanza contra el blanqueo de capitales. Cada banco cuenta con un departamento de cumplimiento o ‘compliance’ encargado de identificar y examinar tras*acciones que, por sus características (grandes cantidades de dinero, origen o destino en paraísos fiscales, uso de sociedades pantalla...), representen un indicio de lavado de dinero. Ante cualquier sospecha, los empleados de cumplimiento deben reportar las operaciones sospechosas a la unidad de inteligencia financiera del país en cuestión, el FinCEN en Estados Unidos o el Sepblac en España, que será la encargada de investigar a fondo los movimientos de dinero y en su caso denunciarlo ante los tribunales.
Pero al mismo tiempo que deben frenar los intentos de blanqueo de dinero, las instituciones financieras se embolsan comisiones millonarias por las tras*ferencias que se realizan a través de sus cuentas. Por ejemplo, JP Morgan ingresó 500 millones de dólares de beneficios por ejercer de banco principal para Bernie Madoff, sentenciado a 150 años de prisión por un gigantesco fraude piramidal. Al igual que ocurre con las grandes auditoras, los bancos tienen pocos incentivos para reportar unas prácticas sospechosas que al mismo tiempo les están generando muchos beneficios en forma de comisiones bancarias. Ello se traduce, como muestran los FinCEN Files, en que en muchas ocasiones los gigantes financieros pasen años y años sin reportar movimientos sospechosos de dinero y, cuando lo hacen, lleguen tarde a las unidades nacionales de inteligencia financiera y tengan un efecto limitado. El propio Sepblac español ha advertido de este fenóme
No me creo que el Santander no esté lavando cosas.
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FinCEN Files: cómo los gigantes bancarios ayudan a blanquear billones de dinero neցro
Una investigación internacional del ICIJ y El Confidencial revela cómo los grandes bancos mundiales fallan una y otra vez en los controles para detener los flujos de dinero ilícito
https://www.ecestaticos.com/imagestatic/clipping/470/e72/470e72b28a74acc1b03c4b005b50bf77/fincen-files-como-los-gigantes-bancarios-ayudan-a-blanquear-billones-de-dinero-neցro.jpg?mtime=1600435999The FinCEN Files: las tuberías del sistema financiero. (Imagen: Pablo López Learte / Irene de Pablo)
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20/09/2020 19:00 - ACTUALIZADO: 20/09/2020 19:56
Standard Chartered Bank tuvo oportunidades de sobra durante más de una década de romper sus lazos comerciales con el Arab Bank jordano. Una de las primeras fue a raíz de que un terrorista se inmolara en 2003 en un autobús en Jerusalén, matando a siete personas y dejando heridas a otras 20. Uno de los supervivientes, Steven Averbach, decidió llevar el Arab Bank a los tribunales de Estados Unidos, acusándolo de haber movido dinero que había servido para financiar el atentado del autobús y otros ataques terroristas. A medida que el proceso judicial avanzaba, los reguladores estadounidenses encontraron en 2005 fallos en los controles del banco jordano contra el blanqueo de dinero, ordenándole que redujera sus tras*ferencias hacia Estados Unidos.
Pese a ello, Standard Chartered miró para otro lado y siguió ayudando a los clientes del Arab Bank a acceder al sistema financiero de Estados Unidos, incluso después de que las autoridades norteamericanas avisaran al banco británico —que luce como patrocinador principal de la camiseta del Liverpool— de que detuviera las tras*acciones a favor de clientes sospechosos. Las advertencias se tras*formaron en diciembre de 2012 en una multa de 227 millones de dólares por haber "conspirado con el Gobierno de Irán" para mover 250.000 millones de dólares en tras*acciones secretas, obteniendo "cientos de millones en comisiones" y dejando "el sistema financiero estadounidense vulnerable a terroristas, traficantes de armas, narcotraficantes y regímenes corruptos".
A pesar de sus promesas oficiales de mantenerse alejado de los clientes sospechosos, Standard Chartered procesó 2.055 tras*acciones por un importe total de más de 24 millones de dólares a favor de clientes del Arab entre septiembre de 2013 y septiembre de 2014. Ese mismo mes, se conoció el fallo del proceso judicial iniciado por Averbach, el superviviente del atentado en Jerusalén muerto en 2010 como consecuencia de las heridas sufridas. Un jurado de Brooklyn encontró al Arab Bank responsable de haber apoyado a sabiendas el terrorismo al tras*ferir dinero camuflado como donaciones en beneficio de Hamás, el grupo terrorista palestino. Pero incluso tras la sentencia —posteriormente anulada por fallos en el procedimiento judicial—, Standard Chartered siguió moviendo dinero con origen o destino en el Arab Bank: casi 12 millones de dólares hasta febrero de 2016.
El truco de la banca corresponsal: ayuda a los pequeños a cambio de un mayor negocio
JESÚS ESCUDERO
Los gigantes bancarios ofrecen intermediación a los bancos más pequeños para introducirlos en mercados financieros más sólidos a cambio de engrosar sus beneficios con comisiones
La relación comercial entre los bancos británico y jordano se puede reproducir a través de los informes de actividades sospechosas (SAR, por sus siglas en inglés) enviados por los responsables de cumplimiento de Standard Chartered a la Red de Control de Delitos Financieros (FinCEN, en inglés) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos. Más de 2.100 de estos documentos, hasta ahora secretos, constituyen la filtración FinCEN Files, una investigación coordinada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) después de que BuzzFeed News obtuviera estos archivos y los compartiera con un equipo formado por más de 400 periodistas de 110 medios en 88 países. Durante los próximos días, El Confidencial y La Sexta publicarán en exclusiva en España el contenido más relevante de estos archivos.
Los archivos filtrados ofrecen una visión única del secreto mundo del sistema bancario internacional. Clientes anónimos, delitos financieros y los fallos de los grandes bancos internacionales a la hora de controlar cualquier tras*ferencia sospechosa e informar al FinCEN, la unidad de inteligencia financiera de Estados Unidos, equivalente al Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias (Sepblac) español. Los documentos recogen tras*ferencias marcadas como sospechosas por los departamentos de cumplimiento de los bancos por un importe superior al menos a dos billones de dólares entre 1999 y 2017, equivalente al PIB de un año de Italia. Los informes SAR reflejan las preocupaciones de los vigilantes dentro de los bancos, pero no son necesariamente evidencia de delitos financieros o malas prácticas.
Aunque representan una gran cantidad, los dos billones de dólares identificados como tras*acciones sospechosas son solo una gota en un océano aún más grande de dinero sucio moviéndose a través de los bancos de todo el mundo. Los FinCEN Files representan menos del 0,02% de los más de 12 millones de informes SAR que las instituciones financieras remitieron a la agencia estadounidense entre 2011 y 2017.
Las ocho claves de los FinCEN Files, la nueva investigación del ICIJ y El Confidencial
JESÚS ESCUDERO
Todos los detalles de la nueva investigación sobre el sistema financiero global coordinada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) y con la participación de El Confidencial
Los documentos muestran que cinco gigantes bancarios mundiales —JP Morgan, HSBC, Standard Chartered, Deutsche Bank y Bank of New York Mellon— continuaron beneficiándose de los negocios de poderosos y peligrosos personajes incluso después de que las autoridades de Estados Unidos les advirtieran de estas relaciones comerciales e incluso los multaran por fallos en el pasado a la hora de contener los flujos de dinero neցro.
En el caso de Standard Chartered y su relación con el Arab Bank, un SAR del banco británico enviado un año después del fallo judicial por el atentado de Jerusalén admitía la "potencial financiación del terrorismo" del banco jordano. Standard Chartered detalló aún más estas actividades en un posterior SAR de seguimiento del caso, al advertir de que "actividades ilícitas" estaban siendo financiadas "bajo la apariencia de beneficencia" y donaciones.
El banco británico no contestó a las preguntas del ICIJ sobre el Arab Bank, y manifestó de forma genérica: "La realidad del sistema financiero global es que siempre habrá intentos para blanquear dinero y evitar sanciones. La responsabilidad de los bancos consiste en construir sistemas efectivos de detección y seguimiento. Nosotros trabajamos codo con codo con los reguladores y las autoridades para llevar a los autores ante la Justicia". En un comunicado, Arab Bank manifestó que "aborrece el terrorismo y no apoya ni fomenta las actividades terroristas". El banco jordano añadió que las acusaciones datan de hace casi 20 años, cuando las leyes antiblanqueo, las herramientas y las tecnologías eran diferentes de las actuales.
Jueces y parte
Los bancos tienen encomendada la misión de ser la primera punta de lanza contra el blanqueo de capitales. Cada banco cuenta con un departamento de cumplimiento o ‘compliance’ encargado de identificar y examinar tras*acciones que, por sus características (grandes cantidades de dinero, origen o destino en paraísos fiscales, uso de sociedades pantalla...), representen un indicio de lavado de dinero. Ante cualquier sospecha, los empleados de cumplimiento deben reportar las operaciones sospechosas a la unidad de inteligencia financiera del país en cuestión, el FinCEN en Estados Unidos o el Sepblac en España, que será la encargada de investigar a fondo los movimientos de dinero y en su caso denunciarlo ante los tribunales.
Pero al mismo tiempo que deben frenar los intentos de blanqueo de dinero, las instituciones financieras se embolsan comisiones millonarias por las tras*ferencias que se realizan a través de sus cuentas. Por ejemplo, JP Morgan ingresó 500 millones de dólares de beneficios por ejercer de banco principal para Bernie Madoff, sentenciado a 150 años de prisión por un gigantesco fraude piramidal. Al igual que ocurre con las grandes auditoras, los bancos tienen pocos incentivos para reportar unas prácticas sospechosas que al mismo tiempo les están generando muchos beneficios en forma de comisiones bancarias. Ello se traduce, como muestran los FinCEN Files, en que en muchas ocasiones los gigantes financieros pasen años y años sin reportar movimientos sospechosos de dinero y, cuando lo hacen, lleguen tarde a las unidades nacionales de inteligencia financiera y tengan un efecto limitado. El propio Sepblac español ha advertido de este fenóme