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Comercio anima a las pequeñas tiendas a vender a través de Alibaba y Amazon - elEconomista.es
Digitalizar hasta las pequeñas tiendas de barrio. Ese es uno de los objetivos que se ha marcado Marisa Poncela, secretaria de Estado de Comercio. Poncela, que inauguró ayer la jornada empresarial '20 años de tras*formación del consumo en España', organizada por elEconomista con el patrocinio de Cetelem, explicó que el sector tiene una gran oportunidad de abrirse al mundo posicionándose en plataformas como Alibaba o Amazon, algo en lo que su departamento ya está trabajando en colaboración con el Icex. "Hoy una tienda de la calle Serrano en Madrid tiene la oportunidad de vender online en China", sentenció.
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Se trata de una gran oportunidad porque, mientras que el comercio online, según explicó, crece a ritmos de dos dígitos -sumará 63.000 millones de euros en la UE el año que viene-, el tradicional lo hace a menos de la mitad. No obstante, puntualizó también que es necesario que esta mayor atención a los canales digitales no repercuta de forma negativa en la venta física tradicional.
Actualmente, el comercio minorista representa el 5% del PIB nacional y los 575.000 establecimientos que existen en España dan empleo a 1,8 millones de personas, revitalizando el centro de las ciudades. "La actividad digital debe complementar la física, ambas deben convivir como lo hacen los pequeños comercios y las grandes superficies", aseguró la secretaria de Estado, que se refirió también a la necesidad de evitar la marginación de aquellos que no están acostumbrados al contacto con las nuevas tecnologías.
El presidente de Editorial Ecoprensa, Alfonso de Salas, insistió en esa misma línea en los debates claves de cara al futuro del sector y su tras*formación: el acceso a Internet, la venta online, el uso del Big Data para personalizar las ofertas, la multiplicidad de canales y, en suma, el profundo cambio que se está produciendo en el consumo.
Remontando la crisis
Durante la primera mesa redonda, sobre el presente del sector, Carlos Núñez, secretario general de Ambe, patronal de la industria de las bicicletas, explicó cómo su sector se había convertido en un refugio durante la crisis: "Hemos crecido a ritmos de dos dígitos; el año pasado vendimos 1,11 millones de bicicletas". Aunque, según dijo, la situación se ha moderado, durante la crisis, muchos trabajadores que se quedaban en paro capitalizaron el desempleo y montaron nuevos comercios, creciendo por encima del 8% anual.
Alfonso Nogueiro, director general de Faconauto, la Federación de Asociaciones de concesionarios de automóviles, le cogió el relevo apuntando que "si algo modula una situación de consumo y un crecimiento, es el automóvil". Aunque aún se está lejos de los 1,4 millones de unidades vendidas antes de la crisis, ese año se superarán los 1,2 millones, manteniendo una tendencia al alza.
Por su parte, Lorenzo Vidal de la Peña, presidente de Ganvam, entidad que agrupa a los vendedores de vehículos de motor, recordó que se han recuperado los índices de confianza previos a la crisis y que el 44% de los consumidores están dispuestos a materializar su compra con financiación. "La situación es buena en un momento de cambios importantes, con un modelo de consumo distinto", dijo al tiempo que advertía del riesgo de reducir la movilidad en el centro de las ciudades.
Xavier Sanz, presidente de Cecomu, la Confederación Española de Comerciantes de muebles, defendió el comercio de proximidad, "que tiene un valor añadido y da servicio", mostrando su rechazo a aquellos fabricantes que pretenden saltarse a la distribución y vender directamente online. Sanz pidió a administraciones y consumidores que defiendan al pequeño comercio porque "allí donde compramos generamos puestos de trabajo".
César Rojo, presidente de Anesdor, la asociación del sector de las motos, detalló que en tan sólo un par de años su industria "perdió dos tercios del volumen de mercado", pero manifestó también que los que han subsistido han salido reforzados: "Las tiendas y las fábricas son mejores, más competitivas".
Ditmar Vierbunchen, presidente de Anfel, la asociación de fabricantes de electrodomésticos, también comentó la gran caída de su mercado, aunque "hoy el mercado crece porque hay que sustituir los electrodomésticos y hay recorrido hasta los ocho millones de productos vendidos al año".
El encargado de abrir la segunda mesa, sobre el futuro del consumo, fue Sergio Escudero, director comercial de la división de auto de Cetelem, que mostró su optimismo respecto a la evolución del sector. "Estemos en época de crisis o no, el automóvil siempre es un sueño para el consumidor, que posiciona por encima de muchos otros bienes", explicó, destacando la labor de las empresas que han sabido generar sinergias y que aportan valor añadido a la financiación, con seguros, garantías u otros productos, como una financiación por uso, como es el caso del renting.
Javier Ramírez, director de banca móvil de MasMóvil, compañía que ha llegado a un acuerdo con Cetelem para prestar servicios financieros a través del móvil, incidió en que hoy "todo el mundo tiene acceso a las redes de gran capacidad, con la extensión de las tarifas planas y el WiFi" y que eso "va a cambiar la forma de relacionarnos. Ramírez advirtió de que "estamos ante un elemento nuevo que lo va a cambiar todo".
Un cambio sociocultural
Federico Iglesias, responsable de marketing de PC Componentes, explicó que su firma nació hace cinco años operando sólo por Internet. "Hay un cambio sociocultural: actuamos de un modo muy diferente a hace seis o siete años; el consumidor no dispone de tiempo y es imprescindible asumirlo", dijo. Iglesias apuntó que, en su opinión, la tienda física no va a desaparecer, aunque insistió en que "la clave está en ofrecer todo lo que el cliente pueda demandar y la digitalización pasa a ser muy relevante".
Por su parte, y al igual que hizo en la primera mesa el presidente de Anesdor, la patronal del sector de las motos, Ramón Bosh, director general de Kawasaki, también abundó en la crisis sufrida por este mercado en los últimos años. "Vendemos una cuarta o una quinta parte de lo que vendíamos, aunque nos hemos hecho más fuertes, eso es seguro". Bosch expuso su creencia de estar en un momento apasionante: "Tenemos claro que el sistema actual funciona, pero no va a funcionar en el futuro; no sabemos si será demasiado pronto o demasiado tarde". La razón de esta importante modificación es que el cliente vive en un mundo digital durante meses antes de ir a un concesionario, analizando y navegando para comparar ofertas".
Jorge Ballestero, director de la división de retail de Cetelem, insistió igualmente en que atravesamos "un momento apasionante, de cambio; las tendencias del futuro van a pivotar sobre la digitalización y la omnicanalidad; no existen las fronteras en los canales".
Esto, naturalmente, conlleva cambios en la información del consumidor, que está mucho más informado y que busca una experiencia de compra, "puesto que acude a un establecimiento con conocimiento, y el vendedor puede personalizarle su oferta". Otro cambio relevante, según dijo Ballestero, se produce también en la forma de pago y el crédito que "aumentan y se simplifican de un modo tras*versal".
Manuel Castro, director general de Amda, la Asociación Madrileña de Distribuidores de Automóviles, completó la idea de tras*formación apuntada por todos los participantes augurando que "en un futuro no habrá nada igual a lo que hay ahora; hace 20 años el concesionario no tenía la alta rotación que tiene ahora, y que es menor de que la que habrá". Esto sucede porque el cliente ha cambiado y ya no pide un crédito para adquirir un vehículo: ahora prefiere usar el producto en vez de tenerlo.
Digitalizar hasta las pequeñas tiendas de barrio. Ese es uno de los objetivos que se ha marcado Marisa Poncela, secretaria de Estado de Comercio. Poncela, que inauguró ayer la jornada empresarial '20 años de tras*formación del consumo en España', organizada por elEconomista con el patrocinio de Cetelem, explicó que el sector tiene una gran oportunidad de abrirse al mundo posicionándose en plataformas como Alibaba o Amazon, algo en lo que su departamento ya está trabajando en colaboración con el Icex. "Hoy una tienda de la calle Serrano en Madrid tiene la oportunidad de vender online en China", sentenció.
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Se trata de una gran oportunidad porque, mientras que el comercio online, según explicó, crece a ritmos de dos dígitos -sumará 63.000 millones de euros en la UE el año que viene-, el tradicional lo hace a menos de la mitad. No obstante, puntualizó también que es necesario que esta mayor atención a los canales digitales no repercuta de forma negativa en la venta física tradicional.
Actualmente, el comercio minorista representa el 5% del PIB nacional y los 575.000 establecimientos que existen en España dan empleo a 1,8 millones de personas, revitalizando el centro de las ciudades. "La actividad digital debe complementar la física, ambas deben convivir como lo hacen los pequeños comercios y las grandes superficies", aseguró la secretaria de Estado, que se refirió también a la necesidad de evitar la marginación de aquellos que no están acostumbrados al contacto con las nuevas tecnologías.
El presidente de Editorial Ecoprensa, Alfonso de Salas, insistió en esa misma línea en los debates claves de cara al futuro del sector y su tras*formación: el acceso a Internet, la venta online, el uso del Big Data para personalizar las ofertas, la multiplicidad de canales y, en suma, el profundo cambio que se está produciendo en el consumo.
Remontando la crisis
Durante la primera mesa redonda, sobre el presente del sector, Carlos Núñez, secretario general de Ambe, patronal de la industria de las bicicletas, explicó cómo su sector se había convertido en un refugio durante la crisis: "Hemos crecido a ritmos de dos dígitos; el año pasado vendimos 1,11 millones de bicicletas". Aunque, según dijo, la situación se ha moderado, durante la crisis, muchos trabajadores que se quedaban en paro capitalizaron el desempleo y montaron nuevos comercios, creciendo por encima del 8% anual.
Alfonso Nogueiro, director general de Faconauto, la Federación de Asociaciones de concesionarios de automóviles, le cogió el relevo apuntando que "si algo modula una situación de consumo y un crecimiento, es el automóvil". Aunque aún se está lejos de los 1,4 millones de unidades vendidas antes de la crisis, ese año se superarán los 1,2 millones, manteniendo una tendencia al alza.
Por su parte, Lorenzo Vidal de la Peña, presidente de Ganvam, entidad que agrupa a los vendedores de vehículos de motor, recordó que se han recuperado los índices de confianza previos a la crisis y que el 44% de los consumidores están dispuestos a materializar su compra con financiación. "La situación es buena en un momento de cambios importantes, con un modelo de consumo distinto", dijo al tiempo que advertía del riesgo de reducir la movilidad en el centro de las ciudades.
Xavier Sanz, presidente de Cecomu, la Confederación Española de Comerciantes de muebles, defendió el comercio de proximidad, "que tiene un valor añadido y da servicio", mostrando su rechazo a aquellos fabricantes que pretenden saltarse a la distribución y vender directamente online. Sanz pidió a administraciones y consumidores que defiendan al pequeño comercio porque "allí donde compramos generamos puestos de trabajo".
César Rojo, presidente de Anesdor, la asociación del sector de las motos, detalló que en tan sólo un par de años su industria "perdió dos tercios del volumen de mercado", pero manifestó también que los que han subsistido han salido reforzados: "Las tiendas y las fábricas son mejores, más competitivas".
Ditmar Vierbunchen, presidente de Anfel, la asociación de fabricantes de electrodomésticos, también comentó la gran caída de su mercado, aunque "hoy el mercado crece porque hay que sustituir los electrodomésticos y hay recorrido hasta los ocho millones de productos vendidos al año".
El encargado de abrir la segunda mesa, sobre el futuro del consumo, fue Sergio Escudero, director comercial de la división de auto de Cetelem, que mostró su optimismo respecto a la evolución del sector. "Estemos en época de crisis o no, el automóvil siempre es un sueño para el consumidor, que posiciona por encima de muchos otros bienes", explicó, destacando la labor de las empresas que han sabido generar sinergias y que aportan valor añadido a la financiación, con seguros, garantías u otros productos, como una financiación por uso, como es el caso del renting.
Javier Ramírez, director de banca móvil de MasMóvil, compañía que ha llegado a un acuerdo con Cetelem para prestar servicios financieros a través del móvil, incidió en que hoy "todo el mundo tiene acceso a las redes de gran capacidad, con la extensión de las tarifas planas y el WiFi" y que eso "va a cambiar la forma de relacionarnos. Ramírez advirtió de que "estamos ante un elemento nuevo que lo va a cambiar todo".
Un cambio sociocultural
Federico Iglesias, responsable de marketing de PC Componentes, explicó que su firma nació hace cinco años operando sólo por Internet. "Hay un cambio sociocultural: actuamos de un modo muy diferente a hace seis o siete años; el consumidor no dispone de tiempo y es imprescindible asumirlo", dijo. Iglesias apuntó que, en su opinión, la tienda física no va a desaparecer, aunque insistió en que "la clave está en ofrecer todo lo que el cliente pueda demandar y la digitalización pasa a ser muy relevante".
Por su parte, y al igual que hizo en la primera mesa el presidente de Anesdor, la patronal del sector de las motos, Ramón Bosh, director general de Kawasaki, también abundó en la crisis sufrida por este mercado en los últimos años. "Vendemos una cuarta o una quinta parte de lo que vendíamos, aunque nos hemos hecho más fuertes, eso es seguro". Bosch expuso su creencia de estar en un momento apasionante: "Tenemos claro que el sistema actual funciona, pero no va a funcionar en el futuro; no sabemos si será demasiado pronto o demasiado tarde". La razón de esta importante modificación es que el cliente vive en un mundo digital durante meses antes de ir a un concesionario, analizando y navegando para comparar ofertas".
Jorge Ballestero, director de la división de retail de Cetelem, insistió igualmente en que atravesamos "un momento apasionante, de cambio; las tendencias del futuro van a pivotar sobre la digitalización y la omnicanalidad; no existen las fronteras en los canales".
Esto, naturalmente, conlleva cambios en la información del consumidor, que está mucho más informado y que busca una experiencia de compra, "puesto que acude a un establecimiento con conocimiento, y el vendedor puede personalizarle su oferta". Otro cambio relevante, según dijo Ballestero, se produce también en la forma de pago y el crédito que "aumentan y se simplifican de un modo tras*versal".
Manuel Castro, director general de Amda, la Asociación Madrileña de Distribuidores de Automóviles, completó la idea de tras*formación apuntada por todos los participantes augurando que "en un futuro no habrá nada igual a lo que hay ahora; hace 20 años el concesionario no tenía la alta rotación que tiene ahora, y que es menor de que la que habrá". Esto sucede porque el cliente ha cambiado y ya no pide un crédito para adquirir un vehículo: ahora prefiere usar el producto en vez de tenerlo.
