Resulta que hoy en Bilbao ha habido una manifestación que pedía elevar la pensión mínima a 1.080€. Me encuentro con dos jubilados a los que conozco de toda la vida, uno el padre de uno de mis mejores amigos, sé que al comienzo asistían a manifestaciones, les digo que raro veros por aquí y no en la manifestación, tenían ganas de hablar y me han pillado por banda. Resulta que estaban cabreados porque no están tan de acuerdo en que eleven la pensión mínima, el argumento que vehementemente me repetían era que el que quiera cobrar más que hubieran cotizado más alto, como lo hicieron ellos, me ponían de ejemplo el dueño de un bar, autónomo, que siempre cotizó el mínimo y ahora exige una subida de la pensión mínima, pues ni hablar, sentenciaban realmente molestos. Tras escuchar la filípica sin intervenir por supuesto, les he preguntado por la familia y nos hemos despedido cariñosamente. Mientras caminaba hacia mi casa no ponía contener la risa. Esos dos jubilados con los que había hablado se prejubilaron con 50 años, a cargo de los fondos europeos, debido a la reconversión industrial de los noventa, llevan 30 años sin trabajar.
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