El Pionero
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El divertido día en la nieve de muchos madrileños pudo terminar en tragedia. Un total de 350 personas tuvieron que ser evacuadas, al quedarse atrapadas en el puerto de Navacerrada de Madrid, con temperaturas de 10 grados bajo cero y una sensación térmica de -21 grados.
La avalancha a la sierra madrileña de Guadarrama se repite cada fin de semana, pese a las recomendaciones de las autoridades. Los aparcamientos de Navacerrada y Cotos se llenan a primera hora de la mañana y la Guardia Civil corta los accesos ante la gran afluencia de vehículos.
Por este motivo, muchos madrileños decidieron subir ayer a la sierra en autobús para disfrutar de la nevada caída en las últimas horas. Sin embargo, se toparon con un día mucho más frío de lo esperado y temperaturas muy bajas.
Los visitantes se encontraron a la intemperie y con escasos lugares para guarecerse hasta primera hora de la tarde, cuando debía pasar el primer autobús de retorno a la capital. Todos quisieron bajar a la vez debido al frío polar que hacía en la sierra. Pero las fuertes retenciones en las carreteras provocaron retrasos en los autobuses.
Además, el colapso fue de tal calibre que muchas personas no podían acceder a los autocares, por lo que tuvieron que ser evacuadas por el Servicio de Rescate e Intervención en Montaña (Sereim), la Cruz Roja y la Guardia Civil de Tráfico.
Los momentos de espera de decenas de personas a que llegase el autobús de regreso se convirtieron en angustiosos, por lo que los agentes de la Guardia Civil tuvieron que tranquilizar a los visitantes.
El Instituto Armado recibió una llamada en la que se alertaba de la hipotermia de una joven. Finalmente, seis autobuses lograron llegar a la zona para evacuar a estas personas que, tras facilitarles mantas térmicas y alimentos, se encuentran en perfecto estado, según informó la Guardia Civil.
Desde La Venta Marcelino, situada en el puerto de Cotos, también tuvieron que atender varios casos de hipotermia de personas que subieron a la sierra, pero no tenían cobijo ni tras*porte para regresar a la ciudad.
Emergencias 112 de la Comunidad de Madrid tuvo que coordinar la asistencia de otras 150 personas aglomeradas, mientras esperaban al autobús a la intemperie. La Guardia Civil también acudió para controlar la cola en el puerto de Cotos.
'NO SABEN ADÓNDE VIENEN'
"En esta época, Cotos se bloquea. Cada vez sube más gente desconocedora de la montaña, que no sabe adónde viene. Si tú llegas vestido como si fueses a dar una vuelta por la Puerta del Sol y las temperaturas bajan a 10 grados bajo cero, te quedas congelado", explica Rafael Sánchez, dueño de La Venta Marcelino.
En el puerto de Cotos, hay escasos lugares donde resguardarse, ya que sólo se encuentra la histórica casa de comidas Venta Marcelino, que cuenta con restricciones de aforo, y el centro de visitantes de Peñalara, que únicamente atiende a la gente con cita previa a causa del el bichito. El Ministerio de Fomento mantiene cerrada la estación de tren de cercanías de Cotos.
Rafael Sánchez lleva tiempo denunciando la falta de infraestructuras y de tras*porte público para atender a la gran afluencia de público hacia la Sierra durante los fines de semana, especialmente, en época navideña.
'UNA LOCURA'
"Es un auténtico caos. Una locura. El montañero se informa de las condiciones meteorológicas. Pero estamos en Navidades y toca subir a la montaña con los niños. Y luego se encuentran con horas y horas de espera o con que no hay aparcamiento", añade el dueño de La Venta Marcelino, con 100 años de historia a sus espaldas.
El día 1 de enero, el primer día con las estaciones de esquí abiertas por el inicio de la temporada, también se produjo el colapso en la carretera de subida a Navacerrada. Una situación que obligó a la Guardia Civil a intervenir y cerrar los accesos a los vehículos.
Pese a las recomendaciones de las autoridades de evitar acudir durante el fin de semana a Navacerrada, la afluencia de visitantes ha sido constante. De hecho, según la Dirección General de Tráfico, los aparcamientos del Puerto de Navacerrada en Cercedilla; Cotos, en Rascafría, y La Morcuera, en Miraflores de la Sierra han estado completos.
Desde Emergencias insisten en que con estas condiciones meteorológicas no es recomendable subir a la Sierra.
El frío polar seguirá durante los diez primeros días del año. Una masa de aire muy frío de origen ártico se apoderará de buena parte del país y dejará temperaturas de entre los -2 y 6 grados en Madrid.
Colapso en la sierra madrileña: 350 personas evacuadas tras quedarse atrapadas en Navacerrada
