El Pionero
Alcalde y presidente de Fútbol Paco premium
Soplar las velas a los 18 años siempre ha significado empezar una nueva etapa. Los jóvenes que se acercan a la mayoría de edad miran ansiosos el calendario, ya que su DNI les va a permitir acceder por fin a ciertos locales de ocio, hacer ciertas compras e incluso apuntarse a la autoescuela. Sacarse el carnet de conducir siempre se ha considerado un símbolo de libertad, madurez e independencia. Sin embargo, a día de hoy, especialmente en las ciudades, aunque algunos sienten el anhelo de autonomía que proporciona el coche, este interés ha ido decayendo.
Una tendencia a la que no son ajenas las autoescuelas de la capital aragonesa. "Mientras que en verano es un perfil muy joven, que aprovecha las vacaciones para ponerse, durante el resto del año es gente más mayor", cuenta Marta Gómez, responsable de marketing de la autoescuela Autius. Un conclusión en la que coinciden también en Autoescuelas Casablanca: "Es algo que hemos notado desde hace unos 5 o 6 años", explica Javier Pérez, director de esta autoescuela con sede en los barrios de Casablanca, Santa Isabel y el Centro. "Ha dejado de ser una prioridad a los 18, prefieren otras cosas", añade Pérez. Sitúan la edad media de sus clientes entre los 22 y 25 años.
Vídeo | La generación Z no prioriza sacarse el carnet de conducir
Es el caso de Sara Martín, de 24 años: "Me apunté a la autoescuela hace tres años por presión social y porque todo el mundo me lo decía y jamás fui", cuenta. También el de Kiara Gómez, de 26: "No lo he visto nunca como una necesidad real, puedo viajar en el tras*porte público que no contamina ni la mitad".
La dificultad económica para conseguir el permiso de conducir y contar con un vehículo propio es una de las causas que hace que muchos de los recién estrenados en la mayoría de edad no tengan entre sus planes acudir a la autoescuela. "Es muy caro y puedo ir andando y en tranvía a cualquier sitio", explica Adrián Ungría de 19 años. "Ahora no lo necesito ni quiero gastarme ese dinero en ello", añade Isaac Cabelo, de 20 años, que se mueve por la ciudad habitualmente en tranvía y patinete. Alba Lasala, de 21, acaba de empezar a prepararse el examen teórico: "He esperado a tener dinero". Si se consigue el apto a la primera en la prueba teórica y práctica, el precio estaría en torno a unos mil euros.
Nicolás García y Lucía Sánchez, de 19 años (izq.), e Isaac Cabelo y Raquel Solano (dcha.) , de 20 y 19 años, respectivamente. H.A.
Las mejoras en materia de tras*porte público en las ciudades también han contribuido a que muchos jóvenes consideren que no es necesario tener coche. Según los datos del Instituto Nacional de Estadística, son más de 25.800 los aragoneses que utilizan el tras*porte público y más de 110.000 los aragoneses que van andando.
"Vivo en Zaragoza y no tenía la necesidad real de sacarme el carnet porque no lo iba a utilizar. Decidí hacerlo durante la esa época en el 2020 de la que yo le hablo para poder ir a mi pueblo cuando quisiera" cuenta Celia Bolsa, que comenzó a conducir a los 29 años. Guillermo Smith esperó hasta los 25: "No me hacía falta. Estaba estudiando y no lo necesitaba", explica. "Me movía andando", añade María Gracia que consiguió su aprobado con 21 años.
Un 49% de los jóvenes entre 16 y 25 años, pertenecientes a la Generación Z –nacidos entre el 1995 y 2009-, no tienen carnet de conducir vehículos a motor. Así lo revela un estudio sobre movilidad y juventud elaborado en 2024 por la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) y Kantar. Además, es una estadística que continúa aumentando. Según los datos de la Dirección General de Tráfico, en 2003, el 75% de los permisos de conducción B que se expedían correspondían a jóvenes de 18 a 28 años, mientras que en 2023 ese porcentaje ha bajado hasta el 67%.Una tendencia a la que no son ajenas las autoescuelas de la capital aragonesa. "Mientras que en verano es un perfil muy joven, que aprovecha las vacaciones para ponerse, durante el resto del año es gente más mayor", cuenta Marta Gómez, responsable de marketing de la autoescuela Autius. Un conclusión en la que coinciden también en Autoescuelas Casablanca: "Es algo que hemos notado desde hace unos 5 o 6 años", explica Javier Pérez, director de esta autoescuela con sede en los barrios de Casablanca, Santa Isabel y el Centro. "Ha dejado de ser una prioridad a los 18, prefieren otras cosas", añade Pérez. Sitúan la edad media de sus clientes entre los 22 y 25 años.
Es el caso de Sara Martín, de 24 años: "Me apunté a la autoescuela hace tres años por presión social y porque todo el mundo me lo decía y jamás fui", cuenta. También el de Kiara Gómez, de 26: "No lo he visto nunca como una necesidad real, puedo viajar en el tras*porte público que no contamina ni la mitad".
La dificultad económica para conseguir el permiso de conducir y contar con un vehículo propio es una de las causas que hace que muchos de los recién estrenados en la mayoría de edad no tengan entre sus planes acudir a la autoescuela. "Es muy caro y puedo ir andando y en tranvía a cualquier sitio", explica Adrián Ungría de 19 años. "Ahora no lo necesito ni quiero gastarme ese dinero en ello", añade Isaac Cabelo, de 20 años, que se mueve por la ciudad habitualmente en tranvía y patinete. Alba Lasala, de 21, acaba de empezar a prepararse el examen teórico: "He esperado a tener dinero". Si se consigue el apto a la primera en la prueba teórica y práctica, el precio estaría en torno a unos mil euros.
Nicolás García y Lucía Sánchez, de 19 años (izq.), e Isaac Cabelo y Raquel Solano (dcha.) , de 20 y 19 años, respectivamente. H.A.
Las mejoras en materia de tras*porte público en las ciudades también han contribuido a que muchos jóvenes consideren que no es necesario tener coche. Según los datos del Instituto Nacional de Estadística, son más de 25.800 los aragoneses que utilizan el tras*porte público y más de 110.000 los aragoneses que van andando.
"Vivo en Zaragoza y no tenía la necesidad real de sacarme el carnet porque no lo iba a utilizar. Decidí hacerlo durante la esa época en el 2020 de la que yo le hablo para poder ir a mi pueblo cuando quisiera" cuenta Celia Bolsa, que comenzó a conducir a los 29 años. Guillermo Smith esperó hasta los 25: "No me hacía falta. Estaba estudiando y no lo necesitaba", explica. "Me movía andando", añade María Gracia que consiguió su aprobado con 21 años.
Aunque algunos también siguen teniendo este interés y deseo. "Me acabo de apuntar para el teórico", indica Ibai Marín, de 19 años. Otros esperaran un poco: "Me gustaría sacármelo antes de que acabe este verano", cuenta el joven de 18 años Nicolás García, acompañado de Lucía Sánchez, quien también tiene previsto empezar a prepararse, "en octubre".Cada vez menos jóvenes se sacan el carnet de conducir en Zaragoza: "No lo necesito"
Las nuevas modalidades de tras*porte público, incluidas bicis y patinetes, han hecho que la generación Z no tenga como prioridad conducir un coche.
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