Alfones
Golas y Louriños
Edilberto Barreto Vargas, un colombiano de 65 años y fundador del Movimiento Machista Nacional, es un candidato que predica lo que aplica. De sus ideas habla con hechos: tiene siete hijos reconocidos con cuatro mujeres y actualmente frecuenta varias novias.
Asegura ser el “mejor polvo del Llano” y uno de sus proyectos más ambiciosos es crear un centro para apoyar a maridos infieles, donde, al ser expulsados de sus hogares por sus esposas, acogerlos bajo un techo y ayudarlos a que se recuperen psicológicamente, como no, con “ayuda femenina”.
Beto, como se le conoce popularmente, es un hombre fiel a sus ideales machos y no titubea al afirmar que a las mujeres no se les pueden dar cargos en las administraciones pues solo hay que ver el desastre que ello conlleva. Tampoco deja indiferente a nadie cuando dice que un hombre con una sola mujer es un medio hombre, huevón y pendejo o que lo que diferencia a las mujeres de uno de sus caballos es que no se cagan por el camino.
Su vida va a caballo, y nunca mejor dicho, entre su amor por su tierra y su defensa a ultranza de los derechos del hombre, los cuales defendió en uno de sus libros más reconocidos y polémicos: Al Rescate del Machismo.
Este es Don Edilberto Barreto Vargas, el último bastión contra el feminismo radical, el abanderado del Macho de toda la vida, la gran esperanza de ojos azules de los empotradores por naturaleza.
Asegura ser el “mejor polvo del Llano” y uno de sus proyectos más ambiciosos es crear un centro para apoyar a maridos infieles, donde, al ser expulsados de sus hogares por sus esposas, acogerlos bajo un techo y ayudarlos a que se recuperen psicológicamente, como no, con “ayuda femenina”.
Beto, como se le conoce popularmente, es un hombre fiel a sus ideales machos y no titubea al afirmar que a las mujeres no se les pueden dar cargos en las administraciones pues solo hay que ver el desastre que ello conlleva. Tampoco deja indiferente a nadie cuando dice que un hombre con una sola mujer es un medio hombre, huevón y pendejo o que lo que diferencia a las mujeres de uno de sus caballos es que no se cagan por el camino.
Su vida va a caballo, y nunca mejor dicho, entre su amor por su tierra y su defensa a ultranza de los derechos del hombre, los cuales defendió en uno de sus libros más reconocidos y polémicos: Al Rescate del Machismo.
Este es Don Edilberto Barreto Vargas, el último bastión contra el feminismo radical, el abanderado del Macho de toda la vida, la gran esperanza de ojos azules de los empotradores por naturaleza.