Bajarse al jovenlandés, justicia española vergüenza nacional.

Supongamos (sólo supongamos), que llega a Algeciras desde jovenlandia un camión con algún producto que se importa.

Supongamos que la Guardia Civil registra el camión y encuentra 5 toneladas de hachís en el falso fondo del camión (que eso es una burrada ya que el hachís no es muy denso ni pesado, luego 5 toneladas es mucho mucho costo.

Supongamos que el camión es de una empresa privada del ya finado tirano Hassan II que con brazo de hierro ostentaba todos los poderes de su país, legislativo, ejecutivo, judicial y religioso.

Supongamos que un periodista español, denuncia el caso publicando un artículo en un periódico.

Supongamos que el juzgado de 1ª instancia de Madrid falla a favor del honor de Hassan II cuyos defensores ponen una demanda por información "inveraz" y pretende condenar a multa astronómica al periodista y además sin conseguir la defensa de Hassan II demostrar que el cargamento de droja no fuera suyo.
Supongamos que después la Audiencia Provincial de Madrid falla lo mismo que el de 1ª instancia.

Supongamos que la cosa sube al TS y al TC y ambos (o sorpresa), priman el honor de Hassan II sobre el delito contra la salud pública que éste comete, sobre la protección de la libertad de prensa que ofrece la Declaración de Derechos Humanos y además sin demostrar que la información del periodista fuera falsa, que no lo era a todas luces.

Supongamos que esto sucedió realmente en 1995 y el periodista era José Luis Gutiérrez (Ex director de Diario 16.) .

Supongamos que la justicia de este país es una mierdecilla fistro que se baja los pantalones ante los dictadores y tiranos por si hay represalias, AYER 1 DE JUNIO DE 2010, 15 años después, ha sido el Tribunal de Estrasburgo quien amparase al J. L. Gutierrez diciendo que la Justicia Española actuó bastante mal.

Supongamos que en Hispanistán tiene más cuenta ser un estafador, un ladrón incluso un tirano sanguinario que ser honrado conforme las cosas funcionan aquí, ¿dónde está el sentido común de los que aplican las leyes?

J. L. Gutiérrez, más de Hassan II

Estrasburgo reconoce que Spain is different

¿Dónde empieza África realmente?

Nothing dijo:

Estas cosas son complejas y técnicas. Recursos, apelaciones y otras cosas hacen muy complicada la administración de la justicia para los simples mortales.

Al rebaño le imparten la justicia con una baraja de cartas. Ir a juicio en este país es exponerse a gran aleatoriedad en la aplicación ( o no ) de las leyes en base a interpretaciones de capas y capas de leyes imprecisas, ineficacia en la gestión y desprecio por el ciudadano.

Lo mejor es apartarse de pleitos y si no hay más remedio buscar el mejor acuerdo, porque en ello te va que te joroben la vida entera por una chorrada. Si, esa vida que solo vas a vivir una vez.

Mientras, a otro nivel, no les preocupa ni la complejidad de la ley ni su lentitud ni su aleatoriedad, porque con la cantidad suficiente de pasta puedes apartarte e incluso desviar ese rodillo mortal.

Es una de las razones por las que al vulgo le da ardor de estomago la ley. No puede confiar en ella, ni puede cambiarla. No está hecha para nosotros.

La ley es el instrumento de subyugación del poderoso hacia los débiles, y su arma principal es la aleatoriedad.

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Sabias palabras querido hamijo, Amén!