Heteropatriarca
Madmaxista
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Recuerdo que en la primera huelga "feminista" se pedían fronteras abiertas para lxs migrantxs. De controlar, al menos, que no tuviesen antecedentes penales no decían ni pío. Ahora que esas "mingrantxs" se han incorporado al movimiento que tanto ha hecho por ellas, tenemos que solo saben victimizarse e insultar, también a las feministas. El siguiente artículo es un cuento de terror disparatado. No me creo nada de lo que dice.
Para empezar, la autora, se refiere a ella misma como "cuerpo" tal y como mandan los cánones nacidos en las universidades pogre del imperio gringo. Dice que en el barrio madrileño de Chamberí la miraba todo el mundo con repruebo por ser racializada, lo cual le da derecho a insultar a las mujeres que le rodean. No hija, no. Te miraban porque te has convertido a ti misma, a tu cuerpo como dices, en un esperpento.
Continúa con el mismo lenguaje victimista diciendo que un hombre cis blanco intentó pegar a una compañera migrante de la misma forma que los conquistadores pegaban a los pueblos originarios, o como los esclavistas, en ¡¡la manifestación del 8M!! Si esto fuese cierto se habría montado una buena y hubiese salido en todos los medios. Pero luego continúa insultando (no para) a las mujeres blancas de la manifestación: "hemos sufrido exotización y ridiculización de nuestros cuerpos y colectivos". ¿Qué pensarán las feministas españolas que llevan décadas gritando que son víctimas y ahora se encuentran con que están arriba en la escala opresor/oprimido? Supongo que, como dice el refrán, "dame pan y llámame sencilla" o "dame subvenciones y llámame opresora".
Para justificar que está aquí y no tiene ninguna intención de integrarse y dejar de ser víctima suelta la perla: "España nunca ha sido blanca". ¿Y? Hubo invasiones de latinos, visigodos, árabes, franceses... pueblos guerreros que se encontraron con otro pueblo guerrero que los recibió con armas en la mano. No nos victimizamos por ello, así es la historia de la humanidad. Lo más curioso es que aquí, a pesar de decir que no somos blancos, no llama a los españoles "pueblos originarios".
Para empezar, la autora, se refiere a ella misma como "cuerpo" tal y como mandan los cánones nacidos en las universidades pogre del imperio gringo. Dice que en el barrio madrileño de Chamberí la miraba todo el mundo con repruebo por ser racializada, lo cual le da derecho a insultar a las mujeres que le rodean. No hija, no. Te miraban porque te has convertido a ti misma, a tu cuerpo como dices, en un esperpento.
Continúa con el mismo lenguaje victimista diciendo que un hombre cis blanco intentó pegar a una compañera migrante de la misma forma que los conquistadores pegaban a los pueblos originarios, o como los esclavistas, en ¡¡la manifestación del 8M!! Si esto fuese cierto se habría montado una buena y hubiese salido en todos los medios. Pero luego continúa insultando (no para) a las mujeres blancas de la manifestación: "hemos sufrido exotización y ridiculización de nuestros cuerpos y colectivos". ¿Qué pensarán las feministas españolas que llevan décadas gritando que son víctimas y ahora se encuentran con que están arriba en la escala opresor/oprimido? Supongo que, como dice el refrán, "dame pan y llámame sencilla" o "dame subvenciones y llámame opresora".
Para justificar que está aquí y no tiene ninguna intención de integrarse y dejar de ser víctima suelta la perla: "España nunca ha sido blanca". ¿Y? Hubo invasiones de latinos, visigodos, árabes, franceses... pueblos guerreros que se encontraron con otro pueblo guerrero que los recibió con armas en la mano. No nos victimizamos por ello, así es la historia de la humanidad. Lo más curioso es que aquí, a pesar de decir que no somos blancos, no llama a los españoles "pueblos originarios".
