Arte en el país ardor de estomago con esculturas de acero corten

El país vASCO esta llena de estás cosas de 22 toneladas que no representan nada. No es que ni siquiera se moleste en hacer algo que pueda ser interpretado, si no que no tiene nada de trasfondo. Si está grandísima cosa de planchas de acero corten oxidadas es arte también lo sería:

Si me hago una manola y extiendo el leche sobre una pared de color ya que sería un artista rompedor.

Si un mono coge su cosa según le sale del ojo ciego y la restriega con las manos sobre un lienzo, es algo cool, ingeniosos e interesante.

Si cojo una chatarra de la sarama y la pongo sobre una peana, sin ni siquiera lavarla primero, soy un expresionista de lo urbano concienciado con la sociedad.

Si despellejo a un muerto, lo diseco y lo pongo estático en cualquier postura soy un visionario.

El arte se concibe como una emanación divina, un don que se da al artista para que sea devuelto de forma pictórica, trasladando lo carente de forma al reino de la naturaleza para gloria de Dios. El verdadero arte eleva el espíritu y acerca a los humanos a la divinidad. Nos recuerda que el ser humano está llamado a lo sublime y a la perfección.

Un arte enfermo solo puede ser fruto de una sociedad enferma, el arte contemporáneo no es una evolución sino una INVOLUCIÓN Y UNA DEGENERACIÓN. El arte verdadero no necesita ninguna guía para ser apreciado, el arte y lo bello son atemporales, ayer, hoy y mañana.

Comparemos como los antiguos europeos de un puñetero bloque de marmol como este



Salía esto otro



Es de las obras de arte más complejas y difíciles de hacer que haya visto nunca. Ya no es trabajar un material incómodo. Es cuestión de proporciones. Algo se te sale de progenitora, y lo arruinas todo, sin botón "deshacer".

Es una muestra de lo bello que puede ser el arte cuando se unen la destreza, el trabajo y el talento.

Un deleite para cualquiera que tenga un minimo de inquietud artistica y un legado que las futuras generaciones admiraran durante años. Exquisitez sublime dejando patente que los clasicos no lo son simplemente por ser de epocas pasadas, si no por su atemporalidad a la hora de sorprendernos.

En 1920 José Pla era corresponsal del diario La Publicidad en París, donde entrevistó a Picasso:

"-¿Tiene alguna idea preconcebida cuando trabaja?
-Ninguna. El cliente. Lo más importante de un pintor es el cliente. En una sociedad como la de antes de la guerra yo no hubiese hecho nada. Habría sido un pintor como tantos. Ahora, acabada la guerra, ha aparecido un nuevo cliente.
-¿Un nuevo cliente?
-El nouveau riche. Éste es mi cliente. Hay muchos. No saben qué hacer con su dinero. Son horribles, maniáticos, pero divertidos. Díganles a los amigos de Barcelona que cada día vendo más, que me estoy haciendo rico, que seré muy rico. (...) El cliente hoy es indecente, pero es un buen cliente. Ya lo dicen ustedes en Barcelona: som al ball i hem de ballar [similar a "hay que bailar al son que tocan"]. (...)
-Y esos clientes que le van saliendo, ¿le gustan a usted?
-Muy poco. Harán que me vuelva comunista...
-Comunista y rico... He oído decir que se ha comprado una ferme en Normandía.
-No la he comprado, pero la compraré. Cuando Manolo decía que si no me hubiese movido de España sería un pintor más bueno, parecía cierto, pero se equivocó. Si no hubiese venido a París no tendría los clientes que tengo. Comunista y rico... Max Jacob dice que es lo mejor que se puede ser..." (Pla, Notas sobre París).

En 1918 empezaron a representar a Picasso los marchantes judíos Georges Wildenstein y Paul Rosenberg (la galería de éste en 1920, cuando se produce la entrevista de Picasso con Pla, se consideraba la más influyente del mundo). A partir de ahí, a ganar dinero y a acudir invitado a las fiestas de postín en París y Londres vestido como un dandi o un nuevo rico.

La suerte que tuvo Picasso fue que su cliente era el NOM (el "nuevo rico" surgido de la Gran Guerra), cuyo objetivo es destruir la civilización y cultura occidentales; y, en el negociado del arte, eligieron como estrella a quien más lo mancillase, un innovador a peor, para lo cual no era necesario ser un genio, ni siquiera saber pintar, sino todo lo contrario; lo importarte era "tras*gredir", cuanto más absurdo, cuanto peor, mejor... Su sofisma es el de las brujas de Macbeth: "Lo bello es feo y lo feo es bello" ("Fair is foul and foul is fair". Con esta frase que gritan al unísono las tres brujas en la escena inicial, se apunta uno de los temas principales de la tragedia, el de la "inversión de valores". A lo largo de la obra es constante la aparición de términos antitéticos relacionados con esta inversión de los valores, dando así la sensación de confusión, de caos, que se puede considerar como una de las claves de esta tragedia). Los tras*gresores ya han tras*gredido leyes y costumbres; las han deshecho, rehecho y contrahecho; y que nadie se atreva a tras*gredirlas.

Picasso es adorado por los liberales que lo auparon y a los que sirvió, y por los comunistas porque era comunista y a los que también sirvió. Liberal y comunista, lo mejor que se puede ser.