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Madmaxista
El fin de la mascarilla que ha aprobado el Gobierno central en todos los espacios puede tardar en llegar a Andalucía. Esto es así porque la consejería de Salud y Consumo ha señalado este miércoles que estudiará el mantenimiento de las mascaras en determinados ámbitos sanitarios. ¿Dónde? En espacios como urgencias o donde estén ingresados pacientes con mayor vulnerabilidad y en residencias de mayores y personas con discapacidad.
Así lo ha indicado el director general de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica, Jorge del Diego, en una entrevista en Onda Local de Andalucía, recogida por Europa Press, en la que ha apuntado que esta decisión «tiene sentido en determinadas zonas, como pueden ser las farmacias, pero con la eliminación general en todos los demás espacios, como hospitales, centros de atención primaria y también centros residenciales, habrá que estudiar si desde Andalucía vamos a hacer un refuerzo de la utilización de mascaras en determinados lugares».
Sobre si esto sería una recomendación o una obligación, Del Diego ha apuntado que cada comunidad autónoma «puede ser completamente competente para marcar obligatoriedad en algunos lugares si así lo considera».
Explican fuentes de la Consejería de Salud que, mientras toman la decisión sobre esta cuestión, lo que impera en Andalucía es lo mismo que en el resto de España: el fin de las mascaras. En todo caso, y si Salud considera que han de ponerse en algunos espacios, se volverán a ver en dichos ámbitos. Pero no será así de momento y en lo que no hay una decisión sobre este asunto.
Esta postura marca un punto de inflexión en la política de la esa época en el 2020 de la que yo le hablo que ha seguido hasta el momento el Gobierno andaluz. Porque, desde que se declaró la alerta sanitaria, la Junta siempre había mantenido el mismo criterio que el Ejecutivo central para conservar la unidad de acción y la claridad para los ciudadanos. Esto podría romperse ahora de seguirse con la imposición de mascaras en espacios donde el Gobierno central las ha abolido.
«Primero, tenemos que estudiar qué supone esa publicación para determinadas normativas que tiene la propia Junta de Andalucía, y a partir de ahí, viendo la situación epidemiológica, el nivel de banderillación, de protección, y cómo es la situación en hospitales, en centros de atención primaria y centros residenciales, ver si hacemos ese refuerzo o incluso hacemos alguna norma donde, en determinados sitios y para determinadas personas, mantenemos la obligatoriedad de uso de mascarilla», ha señalado el alto cargo de Salud.
Preguntado acerca de esos sitios en los que se podría seguir manteniendo la obligatoriedad de mascaras en Andalucía, el director general ha insistido en que «habrá que estudiar si tienen sentido más allá de la esa época en el 2020 de la que yo le hablo en, por ejemplo, urgencias, zonas hospitalarias donde se encuentren los pacientes más vulnerables y con mayor riesgo como las UVI o zona de oncohematología, donde las personas tienen unas defensas mucho más bajas».
Y ha añadido que «también tendremos que valorar en centros residenciales de tercera edad y de personas discapacitadas, el hecho de qué ocurre con aquellos trabajadores o aquellos visitantes que tienen o no sintomatología respiratoria en lugares cerrados, siempre de cara a proteger al más vulnerable». «El hecho de que dejen de ser obligatorias no significa que dejen de ser efectivas y han sido una muy buena medida para controlar determinadas infecciones respiratorias», ha subrayado.
Cuestionado sobre cuándo se sabrá esta decisión, ha respondido que «lo vamos a saber pronto». «En los próximos días, las próximas semanas, lógicamente ya tendremos una decisión y se comunicará», ha remarcado.
Por último, sobre la situación del el bichito, ha explicado que a nivel de contagios en mayores de 60 años, «es francamente buena, estando en el entorno de los 20 casos por 100.000 habitantes, lo cual son unas cifras bajísimas, y eso hace que afrontemos el verano de una forma más tranquila y podamos plantear bien y de forma pausada todas estas medidas». «Tanto a nivel de infección como a nivel de hospitalización la situación es mucho mejor que la que afrontábamos al inicio del verano del año pasado», ha concluido.
Así lo ha indicado el director general de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica, Jorge del Diego, en una entrevista en Onda Local de Andalucía, recogida por Europa Press, en la que ha apuntado que esta decisión «tiene sentido en determinadas zonas, como pueden ser las farmacias, pero con la eliminación general en todos los demás espacios, como hospitales, centros de atención primaria y también centros residenciales, habrá que estudiar si desde Andalucía vamos a hacer un refuerzo de la utilización de mascaras en determinados lugares».
Sobre si esto sería una recomendación o una obligación, Del Diego ha apuntado que cada comunidad autónoma «puede ser completamente competente para marcar obligatoriedad en algunos lugares si así lo considera».
Explican fuentes de la Consejería de Salud que, mientras toman la decisión sobre esta cuestión, lo que impera en Andalucía es lo mismo que en el resto de España: el fin de las mascaras. En todo caso, y si Salud considera que han de ponerse en algunos espacios, se volverán a ver en dichos ámbitos. Pero no será así de momento y en lo que no hay una decisión sobre este asunto.
Esta postura marca un punto de inflexión en la política de la esa época en el 2020 de la que yo le hablo que ha seguido hasta el momento el Gobierno andaluz. Porque, desde que se declaró la alerta sanitaria, la Junta siempre había mantenido el mismo criterio que el Ejecutivo central para conservar la unidad de acción y la claridad para los ciudadanos. Esto podría romperse ahora de seguirse con la imposición de mascaras en espacios donde el Gobierno central las ha abolido.
«Primero, tenemos que estudiar qué supone esa publicación para determinadas normativas que tiene la propia Junta de Andalucía, y a partir de ahí, viendo la situación epidemiológica, el nivel de banderillación, de protección, y cómo es la situación en hospitales, en centros de atención primaria y centros residenciales, ver si hacemos ese refuerzo o incluso hacemos alguna norma donde, en determinados sitios y para determinadas personas, mantenemos la obligatoriedad de uso de mascarilla», ha señalado el alto cargo de Salud.
Preguntado acerca de esos sitios en los que se podría seguir manteniendo la obligatoriedad de mascaras en Andalucía, el director general ha insistido en que «habrá que estudiar si tienen sentido más allá de la esa época en el 2020 de la que yo le hablo en, por ejemplo, urgencias, zonas hospitalarias donde se encuentren los pacientes más vulnerables y con mayor riesgo como las UVI o zona de oncohematología, donde las personas tienen unas defensas mucho más bajas».
Y ha añadido que «también tendremos que valorar en centros residenciales de tercera edad y de personas discapacitadas, el hecho de qué ocurre con aquellos trabajadores o aquellos visitantes que tienen o no sintomatología respiratoria en lugares cerrados, siempre de cara a proteger al más vulnerable». «El hecho de que dejen de ser obligatorias no significa que dejen de ser efectivas y han sido una muy buena medida para controlar determinadas infecciones respiratorias», ha subrayado.
Cuestionado sobre cuándo se sabrá esta decisión, ha respondido que «lo vamos a saber pronto». «En los próximos días, las próximas semanas, lógicamente ya tendremos una decisión y se comunicará», ha remarcado.
Por último, sobre la situación del el bichito, ha explicado que a nivel de contagios en mayores de 60 años, «es francamente buena, estando en el entorno de los 20 casos por 100.000 habitantes, lo cual son unas cifras bajísimas, y eso hace que afrontemos el verano de una forma más tranquila y podamos plantear bien y de forma pausada todas estas medidas». «Tanto a nivel de infección como a nivel de hospitalización la situación es mucho mejor que la que afrontábamos al inicio del verano del año pasado», ha concluido.
Andalucía estudia mantener la mascarilla en algunos espacios sanitarios y residencias
El Gobierno central ha abolido el uso de este dispositivo en todos los espacios pero la Junta puede imponerlo
sevilla.abc.es