Ana, la eterna 'estudiante' sindicalista de 36 años que pide expulsar a los del Elías Ahuja

Nació en 1986. Tiene 36 años. Ha pasado más de una década desde que Ana García se licenció en Comunicación Audiovisual en la Universidad Carlos III de Madrid, pero todavía sigue promoviendo las protestas del Sindicato de Estudiantes que lideró años atrás. Ahora es portavoz de la asociación Libres y Combativas.

Ambas entidades organizaron este lunes una marcha contra los colegiales del Elías Ahúja por los gritos machistas desde las ventanas. Altavoz en mano, la estudiante asturiana cercana a Unidas Podemos pidió la expulsión fulminante de los alumnos de la Universidad. Además, quiere que la UCM rescinda de manera inmediata el contrato con el Colegio Mayor Elías Ahúja.


Al grito de "Fuera machistas y fascistas de la Universidad. ¡Basta ya de manadas!", García y compañía recuperaron las proclamas grabadas en el vídeo como "pilinguis, salid de vuestras madrigueras como conejas" o "sois todas unas ninfómanas, os prometo que vais a amar todas en la capea" y denunciaron que se trataba de una "acción machista y asquerosa" hacia las estudiantes del Colegio Mayor Santa Mónica.

"Esto no es ninguna 'novatada', 'broma entre compañeros' o 'caso aislado'. Este Colegio Mayor, adscrito a la Universidad Complutense, tiene una larga trayectoria de violencia y maltrato hacia las mujeres", apuntaron desde el Sindicato de Estudiantes. Para esta entidad, en el Elías Ahuja "se promueve la cultura de la violación con alevosía". "No nos sorprende, al fin y al cabo es una residencia dirigida y gestionada por los Padres Agustinos de la Provincia Matritense del Sagrado Corazón de Jesús, una institución religiosa católica con claros vínculos con la extrema derecha", sostienen.

Movilización contra la Guerra de Irak
Nacida en Gijón, García se afilió al movimiento estudiantil en 2002 para luchar contra la denominada Ley Orgánica de Calidad de la Educación (LOCE). Un año más tarde, estallaría la Guerra de Irak, ante la que el SE movilizó a "millones" de estudiantes en señal de protesta. La asturiana, que heredó su afición por este grupo de su hermana mayor, se trasladó poco después a Madrid para estudiar Comunicación Audiovisual en la Universidad Carlos III, en el Campus de Getafe, tal y como publicó Vozpópuli.

"Trabajo ocasionalmente en proyectos puntuales de Comunicación Audiovisual, dando clases particulares o haciendo promociones en centros comerciales", explicó a este medio en 2017. Aquel año, el Congreso debatía un Pacto Educativo estatal que no salió adelante para sorpresa de nadie. Y García, que por entonces tenía unos 30 años, intervino como eterna representante estudiantil en la comisión parlamentaria creada para abordar el ansiado acuerdo.

Allí cargó duramente contra PP y Ciudadanos. Teófila Martínez, que presidía el órgano, pidió a la sindicalista que rectificara en numerosas ocasiones. La joven retiró lo dicho en cuanto a la formación naranja, a la que definió como "mamporreros del PP", pero se negó a recular, pese a la insistencia de la dirigente 'popular' gaditana, en cuanto al uso del escaño por parte de algunos parlamentarios "para robar y enriquecerse": "No lo decimos nosotros, lo dice la Justicia". "No conozco ningún caso de un diputado que haya usado su escaño para enriquecerse", espetó Martínez.

El Sindicato de Estudiantes y la independencia de Cataluña
Dos años después, se desplazó a Barcelona para secundar una huelga en la que se reivindicó la independencia de Cataluña. "¡Queremos Països Catalans!", gritaban con un megáfono desde la plaza de Sant Jaume. Según recogía el Sindicato de Estudiantes en su web, su lucha no era solamente "educativa", sino también para combatir "la represión franquista contra el pueblo catalán".

"Hemos echado atrás las reválidas franquistas librando a muchos jóvenes de la expulsión del sistema educativo. Pero nuestra lucha no es sólo educativa: también nos hemos salido a las calles contra la represión franquista desatada contra el pueblo catalán y defendido su legítimo derecho a decidir y a hacer realidad la república catalana de los jóvenes y los trabajadores", defendían desde la asociación. En 2020, también pidieron el voto para EH Bildu en la campaña electoral vasca.

García, que fue multada con 700 euros por el Ministerio del Interior en aplicación de la Ley de Seguridad Ciudadana por usar megafonía no permitida en el 8-M de 2019, ahora ejerce de portavoz de Libres y Combativas. Junto a Coral Latorre, actual representante del Sindicato de Estudiantes con 27 años, piden la expulsión de los alumnos del Elías Ahúja por los gritos machistas hacia las alumnas del Mónica.

Piden la expulsión de estudiantes por unos insultos mientras no piden la expulsión de inmis ilegales delincuentes y violentos.
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