1.CORREOS LANZA UNA cosa DE SELLO EN HOMENAJE AL PCE. PORQUÉ ES UNA cosa...

qaral

Himbersor
Desde
21 Ago 2021
Mensajes
2.401
Reputación
1.321
GOBIERNO DE ESPAÑACorreos lanza un sello en homenaje al PCE mientras Bruselas exige investigar los crímenes del comunismo
Correos destaca el papel del Partido Comunista de España durante la Guerra Civil
El Parlamento Europeo equipara el comunismo al nazismo y pide que se investiguen sus crímenes
Los sindicatos de Correos acusan al amigo de Sánchez de mandarles un "gorila" para agredirles
El PCE expulsó a un militante por acoso sensual, lo 'indultó' y ahora es el líder del partido en Sevilla

Sello PCE
El sello del PCE.

Correos lanza un sello conmemorativo del Partido Comunista de España (PCE) con motivo de su centenario. El sello refleja en su diseño los símbolos de la ideología comunista: una hoz, un martillo y una estrella de cinco puntas. A esto hay que añadir que el tonalidad de estos símbolos son los mismos que la bandera de la Segunda República: rojo, amarillo y jovenlandesado. La empresa pública considera que esta efeméride merece ser celebrada debido a que «el PCE se convirtió en el motor de las fuerzas que lucharon por la democracia».
La empresa pública apuesta de esta forma por rendir homenaje a una ideología que ha provocado miles de muertes y de miseria a lo largo de la historia, siendo su máximo exponente el genocida Josef Stalin, secretario general del Partido Comunista de la Unión Soviética de 1922 hasta 1952. En octubre de 2019, el Parlamento Europeo equiparó al comunismo con el nazismo y aprobó una resolución para investigar sus crímenes porque ambos sistemas totalitarios están emparentados por sus «asesinatos en masa, genocidios y deportaciones» a una escala «hasta entonces nunca vista».
El PCE está implicado en la mayor matanza de la Guerra Civil. Ocurrió en noviembre de 1936 en Paracuellos del Jarama, un pueblo cerca de Madrid. A primera hora del día 7 de noviembre, poco tiempo después de comenzar la guerra, llegaron al pueblo tres autobuses de dos pisos junto a varios camiones llenos de milicianos con presos políticos derechistas que fueron sacados de las cárceles de Madrid y trasladados hasta su triste final, donde alrededor de 6.000 personas, incluidos niños, fueron fusiladas.

Coincidiendo con las fechas de este criminal aniversario, los sellos del PCE comenzarán a circular a partir del próximo lunes, 14 de noviembre, debido a que, según Correos, ese mismo día de 1921 surgió el Partido Comunista de España «tras la intervención de la Internacional Comunista» para unir al Partido Comunista Español y al Partido Comunista de España. «Una historia con muchos rostros de mujeres y hombres que decidieron comprometerse para cambiar la realidad de un país injusto y desigual», resalta la empresa pública en su página web. Una de las militantes destacadas del PCE es la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz.
Esta efeméride contará con una tirada de 135.000 unidades y con un valor postal de 0,75 euros. El PCE ha agradecido en las redes sociales a Correos la celebración de esta efeméride.

GUERRA CIVILEl comunista Carrillo protagonizó la mayor matanza de la Guerra Civil: 6.000 fusilados en Paracuellos
Correos lanza un sello en homenaje al PCE mientras Bruselas exige investigar los crímenes del comunismo
El Parlamento Europeo equipara el comunismo al nazismo y pide que se investiguen sus crímenes

La matanza de Paracuellos del Jarama.
La matanza de Paracuellos del Jarama.

Correos ha anunciado que lanzará un sello del Partido Comunista de España (PCE) con motivo de su centenario. Estos días también se está conmemorando una de las mayores matanzas que se produjeron durante la Guerra Civil, la de Paracuellos del Jarama (Madrid). A principios de noviembre de 1936, el bando republicano llevó a cabo fusilamientos masivos a prisioneros del bando nacional o sublevado o sospechosos de simpatizar con este bando. Se estima que el número de muertos fue alrededor de 6.000. En estos fusilamientos participaron milicias del Partido Comunista de España. El máximo responsable político de esta matanza fue el entonces Consejero de Interior de la Comunidad de Madrid, Santiago Carillo.
A primera hora del 7 de noviembre de 1936 llegaron tres autobuses de dos pisos y varios camiones a este municipio madrileño. Estos vehículos estaban repletos de presos políticos derechistas y de milicianos del bando nacional, que fueron sacados de las cárceles de Madrid. El Gobierno republicano decidió trasladarse a Valencia ante el avance y la inminente entrada de las tropas franquistas. Por ello, se decidió evacuar a los presos por la preocupación de que pudieran ser liberados y así ingresar en las filas del bando nacional.
Los presos fueron trasladados en los vehículos antes citados, pero nunca llevaron a su destino final dado que fueron fusilados en masa en Paracuellos. Oficialmente se dijo que estos presos serían enviados a Valencia. Las víctimas de esta matanza fueron prisioneros del bando nacional, políticos que no simpatizaban con la República o sospechosos de apoyar al bando contrario.

Los ejecutores de este gran masacre fueron, principalmente, piquetes desplegados por las milicias del Partido Socialista, el Partido Comunista de España y el sindicato de la UGT. Santiago Carrillo, el Consejero de Interior de la Comunidad de Madrid, fue, según varios informes, el mayor responsable político de la operación que se llevó a cabo. Los fusilamientos se fueron sucediendo un día tras otro hasta que finalizaron el 4 de diciembre de 1936.
«Represión republicana»
La matanza de Paracuellos es descrita por el Gobierno de Pedro Sánchez como «el máximo exponente de la represión republicana». Así consta en el archivo de fosas que maneja el Ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, dirigido por el socialista Félix Bolaños.

«Las matanzas se realizaron con motivo de los traslados de presos, conocidos como ‘sacas’, desde diversas cárceles de Madrid entre el 7 de noviembre y el 4 de diciembre de 1936. Las expediciones partieron de la guandoca Modelo, de la de Porlier, de la de San Antón y de la de Ventas. Según los estudios realizados, entre esas fechas, se llevaron a cabo 33 traslados de presos de las cuales 23 terminaron con asesinatos. Las víctimas fueron depositadas en siete fosas excavadas en Paracuellos de Jarama; la última de ellas fue excavada después de la Guerra en 1940 para acoger los féretros de las 414 víctimas exhumadas de Soto de Aldovea en Torrejón, así como otras víctimas asesinadas en fechas diferentes procedentes de lugares como Boadilla del Monte y Aravaca», destaca este archivo.
Además, indica que para entonces y «ante el avance de las tropas franquistas y su inminente entrada en Madrid», el Gobierno republicano había abandonado la capital y se había trasladado a Valencia, «encargando la defensa de la ciudad a la Junta de Defensa presidida por el general Miaja». Fue esta Junta de Defensa la que estuvo al mando de los presos.



Tribuna EC10
Tribuna
Por
Pedro Gil


(des)Memoria Democrática ante los crímenes del comunismo en España
Durante los primeros años de la Dictadura, el PCE liquidó física y jovenlandesalmente a destacados dirigentes del partido. Trilla, Quiñones, Monzón y Comorera son algunos de ellos
Foto: Hombre sosteniendo una bandera comunista. (EFE)
Hombre sosteniendo una bandera comunista. (EFE)
Por
Pedro Gil
22/08/2021 - 11:52 Actualizado: 22/08/2021 - 12:17
Tras la exhumación del cadáver del dictador del Valle de los Caídos, el periodista Jorge Bustos promulgó la Ley del Heroísmo Socialista. Ley que determina en su único artículo que "La intensidad de la lucha (del PSOE) contra Franco es directamente proporcional al tiempo tras*currido desde la fin del dictador". A la vista de algunas recientes decisiones políticas quizá sea el momento de avanzar en su articulado. “Art. 2.- De la Memoria Fluida. Si la pervivencia de un gobierno socialcomunista dependiese de ocultar, olvidar o negar sucesos de la Guerra Civil y posteriores, la facción socialista actuará atendiendo al principio de preservar la coalición."

La aprobación del proyecto de Ley de Memoria Democrática, en el último Consejo de Ministros del mes de julio, vino precedida por dos sucesos sin relación aparente. El primero, la reedición de El Libro neցro del Comunismo, una obra colectiva dirigida por el historiador francés Stéphane Courtois, publicada en 1997 y que dedica un capítulo a la represión comunista en la retaguardia republicana, especialmente tras los sucesos de abril de 1937 en Barcelona. El segundo, el voto negativo del PSOE, en el Parlamento Español, de una resolución condenando todos los totalitarismos, incluido el comunista, que socialdemócratas y conservadores habían apoyado en el Parlamento Europeo. "La izquierda cierra filas para evitar que el Congreso condene el comunismo", se leía en titulares el pasado 23 de marzo.
Foto: Valle de los Caídos. (Reuters)

'Revisionismo', memoria y fraude: la ley sobre la Guerra Civil del gobierno no es democrática
Julio Martín Alarcón
Con ese “cierre de filas” propio de una consigna del Komintern, las organizaciones comunistas en el Congreso sumaron a la ignominia a sus compañeros de viaje socialistas evitando que se abriera la posibilidad de condenar los casos de violación de derechos humanos, tortura y desapariciones, que agentes soviéticos con la participación necesaria, según muy distintas fuentes, de destacados miembros del Partido Comunista de España infligieron a militantes de izquierda, españoles y de otras nacionalidades. Represión que buscó la destrucción física y jovenlandesal. Aplicada con saña contra antifascistas del Partido Obrero de Unificación Marxista (POUM) y la Confederación Nacional del Trabajo (CNT). Posteriormente, durante los primeros años de la Dictadura, el PCE liquidó física y jovenlandesalmente a destacados dirigentes del partido. Los nombres de Trilla, Quiñones, Monzón y Comorera son algunos de ellos.
Asesinato del dirigente del POUM Andreu Nin
“A las cuatro de la tarde del día 16 de junio de 1937, Andreu Nin salió de Barcelona en automóvil. Le habían detenido agentes rusos de la GPU y del Partido Comunista. No puede asegurarse si la caravana se detuvo en Valencia; pero lo cierto es que rápidamente continuó el viaje hasta Madrid. En la capital, se le recluyó en la ‘checa’ secreta del Paseo de la Castellana. A los dos días, se le volvió a trasladar a un hotel particular y aislado situado en Alcalá de Henares. El 22 de junio un grupo de oficiales rusos y polacos de la Brigada Orloff, entonces de guarnición en el Pardo, le arrancó de esta prisión clandestina y le asesinó alevosamente”. Así recoge Juan Andrade el secuestro y la fin de Nin (cuadernos Spartacus: L’assassinat d’Andrés Nin. Ses causes, ses auteurs, junio de 1939. Citado en Pelai Pagès, EBRE nº 38, 2010).

El propio Andrade identifica a los que participaron en la detención de Nin. A los policías miembros de la brigada especial y a los jefes que tuvieron una participación directa en ella: “David Vázquez, jefe de policía de Madrid; el teniente coronel Antonio Ortega, director general de seguridad, el coronel Ricardo Burillo, comisario en jefe de Barcelona, y Gabriel Morón, quien fuera subdirector general de seguridad del Gobierno de Negrín”. Todos ellos militantes comunistas. La represión contra los dirigentes del POUM fue apoyada tanto por la prensa comunista como por los máximos dirigentes del PCE y del PSUC, que bramaban los mismos argumentos inventados por los soviéticos.
 
Solo los usuarios registrados pueden ver el contenido de este tema, mientras tanto puedes ver el primer y el último mensaje de cada página.

Regístrate gratuitamente aquí para poder ver los mensajes y participar en el foro. No utilizaremos tu email para fines comerciales.

Únete al mayor foro de economía de España

 
Yo creo que deberíamos hacer todos un boicot a correos desde este lunes, y si nos ofrecen el sello, no comprarlo
 
Volver